Cada organización establece como meta unos objetivos más o menos fijos. Si la meta está clara, sólo hace falta definir el camino y esto lo logramos a través de una planificación estratégica. Identificamos si necesitamos seguir una planeación intuitiva o formal.
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La planeación intuitiva es una técnica de planificación en la que las decisiones se toman de manera ágil, a corto plazo y según los contratiempos del momento, bajo la presión de unas consecuencias no documentadas.
La planeación formal, por su parte, está estructurada y basada en el análisis. Identifica problemas y soluciones a largo plazo, mientras que puede llegar a planificar estructuras más complejas, equipos más amplios con recursos optimizados.
Ambas entran dentro de la planeación estratégica empresarial y permiten un seguimiento continuo con el fin de clarifican oportunidades y problemas, sean a corto, medio o largo plazo.
Índice
Pensamiento intuitivo
El pensamiento intuitivo es un proceso cognitivo en el que no se realiza un análisis y documentado previo para la toma de decisiones. Nace de la percepción intuitiva y sensorial e interviene desde el subconsciente.
Se suele usar para la resolución de problemas cotidianos, en los que se requiere una determinada urgencia, priorizando la inmediatez frente a la calidad de respuesta. Sin embargo, muchas veces ¿por qué sentimos que esa primera corazonada resulta ser la más acertada? A muchos de nosotros nos ha pasado esto alguna vez.
Con el pensamiento intuitivo podemos acercarnos a comprender mejor nuestros propios límites, a entender las necesidades más primitivas, midiendo así las consecuencias de las decisiones a través de nuestra capacidad más humana o natural.
En el pensamiento intuitivo no hay interferencias externas que afecten de alguna manera a la solución intuitiva que proponemos. Están lo más profundo de nosotros. Estas respuestas inmediatas nos sirven como base con la que construir un estudio de las posibles consecuencias, con el fin de llegar al pensamiento que defina finalmente un proceso de planificación estratégica.
Pensamiento estratégico
El pensamiento estratégico o planeación formal responde a una serie de métodos analíticos enmarcados en técnicas de planificación, orientadas a la consecución de un determinado objetivo.
A través del pensamiento estratégico, identificamos un conjunto de instrucciones que deben seguir colaboradores, empleados y demás personas involucradas en alcanzar dicha meta. Acciones que se desarrollarán en un periodo de tiempo planificado con anterioridad.
Se diseña un plan estratégico con el fin de responder a la manera de impulsar la competitividad y rentabilidad de la empresa. Precisamente, una de las claves de esta estrategia es la Dirección y Gestión de Proyectos. Muchas empresas, utilizan esta herramienta para ser más competitivos en mercados saturados, en los que la innovación es una obligación.
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Planificación estratégica: ¿cómo combinar planeación intuitiva y planeación formal?
Muy fácil, gracias a las simulaciones de planificación. Esto se puede hacer gracias a aplicaciones online como Sinnaps, en las que podemos guardar tantos cambios como necesitemos mientras prevemos su impacto en todo nuestro trabajo.
Nos surgen esos imprevistos que debemos gestionar rápido. Usamos la planeación intuitiva, con respuestas inmediatas. Pero, ¿qué riesgos implicarán sus consecuencias? Automáticamente, la herramienta de planificación nos dará las respuestas. Lo estudiamos, aplicamos el pensamiento estratégico. ¿Nos conviene implantar esa modificación de última hora? Sí, aplicamos la planeación formal tras el estudio que nos ofrece la herramienta.
De esta forma, damos agilidad a la planeación formal, al mismo tiempo que mantenemos su efectividad de respuesta. Combinar planeación intuitiva y planeación formal a través de herramientas de planificación como Sinnaps.